Parece natural que un fotógrafo se interese por las figuras
y estrellas que llegan a Donosti convocadas por el Zinemaldia, Festival de
Cine. Pues este fotógrafo irá a Donosti pero no fotografiará estrellas, solo
verá el ambiente mientras revive un mes de rodaje en el valle de Baztan de la
película que lleva precisamente ese mismo nombre con una trama relacionada con el
singular mundo de los agotes y que se estrena el lunes con todos los honores.
Ya lo dije: hacer la foto fija en un largometraje es una
valiosa experiencia por la convivencia con un equipo de creadores, por la
dimensión y presión del trabajo que exige cada minuto, cada plano, cada
fragmento de la historia. También por la exigencia y compromiso que se asumen y
queda aún la sorpresa del resultado.
Por eso estaré el lunes en el Festival de Cine de Donostia,
porque la película ya tiene forma, tiene cartel y tiene un contenido que
transmitir. Mi trabajo en Baztan fue ser “fotofija” pero también fui actor en
algunos planos que acaso hayan terminado en el montaje final o se hayan
desconsiderado. El lunes toca retornar a la experiencia. Desde el dia 5 de octubre la pelicula estará en las salas.
Que guay....vivirlo pero de otra manera! Actorazo!!! muacks!
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