Está en Bilbao, en la Sala Rekalde, y se presenta a
través de 150 imágenes que recorren el curriculum visual de Vari Caramés
(Ferrol 1953). Un lujo de descubrimiento de este fotógrafo del sentimiento que,
según nos confesó, no analiza, no espera, dispara por impulso, porque se lo
pide el corazón. En la exposición hay delicias fotográficas de alto interés,
siempre atrapadas en película fotográfica a modo de “instantes coleccionados”
en series que agrupan distintos momentos de su mirada, diferentes atenciones a
lo visto por Caramés. Las miradas a través de las ventanas, muchas veces
enigmáticas, casi siempre incitando a la confusión al espectador, son
recurrentes y parecen asimilarse al mirar a través de las lluvias y las brumas
de su tierra gallega.
Muy inspirado en los clásicos, con sus arranques en blanco y
negro que aún practica, se diría que él mismo es un clásico en el modo de
sugerir más que enseñar, alejado del reporterismo y muy impresionista cuando
dispara en color.
Me ha gustado
Caramés, me he interesado Caramés que debo revisitar antes de que sus
fotografías se vayan de la sala Rekalde el 8 de julio para viajar a Badajoz y a
Coruña. Se lo dije: lo que más me ha tocado es su serie nadar cargada de intensidad y propuestas para recrearse.
muy buen fotógrafo!
ResponderEliminarsabrías decirme qué cámara está sujetando vari en la segunda foto??
Es, creo, una Konica Hexar, de película
ResponderEliminarmuchas gracias.
ResponderEliminarbuena cámara y en buenas manos!
:)
Lo ultimo es la foto que sacó él?
ResponderEliminarNo, es un foto que yo hice estando con él en la presentación, pero muy al tono de algunas de sus miradas
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