9 de marzo de 2019

Volcanes, mares y luces canarias


Paisajes infinitos, incalculables masas de lavas arrastradas hasta el océano, montañas circulares que son volcanes y pueblos de blanco inmaculado. Todo alumbrado por las luces atlánticas, brillantes, intensas y luminosas a rabiar. Es así cualquier viaje por Lanzarote: mirando cráteres, rocas  y cenizas de colores, acariciando intensos azules de mar, peinando vientos enrabietados que encrespan el alma, y tropezando conciencias y coincidencias donde manda lo humano sobre horizontes de piedra. Acaso nos falte el agua, el murmullo del río y la sombra del bosque pero no por eso estar aislado entre arrecifes y sobre volcanes es un apasionante ejercicio para el fotógrafo. Incluso si sospechara que en cualquier momento el suelo puede arrugarse y abrirse bajo sus pies.










2 comentarios:

  1. ¡Preciosos paisajes, Santi! Para colmar tanto el sensor de la cámara como el cerebral...

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  2. Gracias Kepa. Es una borrachera de paisajes, sin duda.

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