Es un decir porque el alcalde de Bilbao no vuela, solo baila.
Lo hace en la foto tomada en el día de la "Amatxu", Virgen de Begoña
y patrona de la capital de Bizkaia, cuando es tradición reciente que quien
preside el consistorio de la Villa baile el aurresku. Y ahí lo está haciendo,
en una foto también capital del monográfico sobre Bilbao que la revista Ibilka
acaba de poner en circulación.
Me ha tocado ilustrar el todo de ese especial, además de escribir
alguno de sus artículos, y he procurado hacerlo, también mientras organizábamos
el índice de contenidos, enfocando una mirada personal que, como bilbaíno y
fotógrafo, ha buscado poner acentos donde casi nunca lo hacen los medios
"oficiales" ni las oficinas de prensa municipales, interesado en contar el
Bilbao necesario y el que la memoria debiera guardar para hacer historia sin
olvido y que ese intento de vender modernidad que invade a las esferas oficiales parece enterrar bajo un manto efectista.
En Ibilka está el Bilbao viejo y el Bilbao nuevo, la raíz sombría y la
imagen brillante porque nada es una sin la otra, porque no existe futuro sin
pasado. En el trabajo con el pie en tierra hay muchas horas de mirar y esperar,
no pocas de pensar el qué y el cómo debería abordarse este retrato de Bilbao
para que fuera verdadero.
Solo los lectores de Ibilka podrán decir si es cierto lo que
contamos, al menos si les parece creíble que este Bilbao de varias caras sigue
existiendo todavía y lo encuentran en esa visita que esperamos harán algún día muy próximo.
Zorionak Santi.
ResponderEliminarEskerrik asko, Javi Castro.
ResponderEliminar