21 de febrero de 2012

Estamos en Carnaval



Hace más de tres semanas que los navarros avanzaron sus rituales de carnaval. Ruidosos, como debe ser, coloristas e infatigables. También algunos adelantados por tierras alavesas y guipuzcoanas han sorteado los paisajes nevados y por Iparralde kaskarotes y katilungorris hicieron sus cuestaciones jocosas. Es bonito reencontrarse  cada año, cuando la estación del frío parece querer vencer al calendario, con las fiestas que firman lazos sociales, cuanto más íntimas mejor. Hace solo unos años, en la Llanada alavesa, recuperaron su carnaval los pueblos de Ilarduia, Egino y Andoin. Igual que hicieron antes localidades como Zalduondo o Salzedo, también el ominipresente y afamado carnaval de Lanz, rescatado en los años sesenta de las cenizas causadas por las guerras y la dictadura. Lo mejor de Ilarduia y sus vecinos es precisamente su carácter familiar, algo ya perdido en las celebraciones mediáticas cargadas de curiosos, fotógrafos y estudiosos de todo pelaje. Lo mejor de estas celebraciones es ver a la gente hacer  “su carnaval”, no el que esperan las cámaras de televisión, vivir su fiesta y disfrutarla porque eso es precisamente la fiesta.



Estamos en las fechas grandes, entre los rituales que vencen el martes y con los que prolongan la fiesta al fin de semana siguiente; en todos ellos se corren jolgorios y disfraces, ritos y sonidos cargados de emociones. Compartimos algunas. Propósito ineludible.





1 comentario: